Tu vida existe después de ese amor. Cuando puedas, incluso aunque sigas sintiendo el corazón roto, pon tu esfuerzo en construir tu vida.
¿Construir qué? Amistades, proyectos, un espacio nuevo, darle un nuevo look a tu pelo o tu habitación, escribir un libro, meterte a estudiar, cambiar de trabajo. Busca tu nuevo camino y tu nueva rutina.
Y es que la vida está llena de posibilidades. Ahora que estás en una nueva etapa, puedes vivir más cosas que tú quieres vivir.
Tú existes después de ese amor. Cuanto más construyas, más existirás.